No se trata sólo de lo que tú quieres decir sobre tu empresa. Un mensaje efectivo debe construirse con base en lo que quieres que la gente sienta, piense y haga respecto a tu producto o servicio. . En este artículo te comparto los 5 elementos clave para crear un mensaje efectivo.
Un mensaje efectivo es aquel que el público entiende fácilmente y que genera la acción esperada. De lo que se trata es que la audiencia reconozca rápidamente y de manera sencilla la información para que reaccione exactamente como quieres: contratando un servicio, comprando determinado producto, haciendo una reserva, participando en una promoción, etc.
Para construir un mensaje efectivo es necesario hablar de una manera relevante y directa a tus clientes. Así que las primeras preguntas que debes hacerte son:
1. Qué quieres decir sobre tu marca
2. Qué quieres que la gente diga sobre su marca
Esta segunda pregunta es fundamental para construir un mensaje que genere impacto, pues lo importante es determinar lo que es relevante para tu audiencia, no para ti, a tu cliente no le interesa si tienes 15 años de experiencia, si eres el primero en el mercado, si tus instalaciones fueron renovadas. Lo verdaderamente importante es que le digas al público lo que tú puedes hacer por él.
Para que sea efectivo, tu mensaje debe:
Ser preciso
En tu mensaje sé claro. Un anuncio será efectivo si el cliente entiende lo que quieres decir y puede actuar en consecuencia. No ocultes tu mensaje en palabras o frases rimbombantes disfrazadas de creatividad, pues puede confundir al público y así no cumplirá su propósito.
Ser concreto
Crea un mensaje conciso. Facilita las cosas a tu cliente, que tu mensaje sea breve permitirá que la audiencia preste atención a lo que estás diciendo de inmediato, por eso es importante que no dejes la información relevante al final. Captura en un enunciado conciso tu mensaje.
Tener una idea central
Entre más información le des al cliente, menos datos retendrá: enfócate en una idea, elige un argumento, una razón por la que debe preferirte a ti y no a la competencia. No expongas todos los beneficios de tu producto o servicio, elige uno que represente lo que quieres que el cliente sepa de tu marca.
Ser creíble
Es importante generar confianza en el público, evita caer en ofrecimientos excesivos y promesas exageradas. No ofrezcas algo que tu producto o servicio no posee. Piensa que una propuesta exagerada crea dudas sobre que la empresa o producto sea capaz de cumplir lo prometido.
Ir al grano
Sé directo, que tu mensaje transmita de inmediato la información necesaria para que tu cliente actúe justo como lo esperas. Ten en cuenta que el público se ve bombardeado diariamente por miles de mensajes, así que debes actuar rápido para llamar su atención antes de que pase a la siguiente idea, no desperdicies tu tiempo y el del público en información complementaria o de relleno, eso puede provocar que el cliente deje de prestar atención.
Por último, no te olvides de dos detalles fundamentales:
– Ofrece la información que el cliente necesita para actuar: teléfono, dirección, lugar de venta, fechas, etc.
– Elige el medio adecuado para la difusión de tu mensaje, aquel en el que tu público meta esté presente.
Recuerda que dinero invertido en un mensaje irrelevante es dinero perdido, por lo que debes trabajar para utilizar el lenguaje preciso para transformar un simple anuncio en un generador de clientes e ingresos. Dile al público lo que quiere escuchar, no lo que tú quieres decir.