Los sueños no se cumplen, se trabajan

Si eres de las personas que de una u otra manera se dedican a las ventas, sabrás que en el camino de Mayra hacia la realización de su sueño hay un pequeño detalle: ¿Cómo convencer a los clientes? ¿Cómo elevar las ganancias de la empresa en la que trabajas para conseguir un ascenso? La verdad es que a nadie le gusta sentirse acosado por vendedores, que lo presionen o le insistan, que le llamen 30 veces por teléfono con mensajes de “compre ya…” ¿Y entonces?

La respuesta está en el branding emocional. Mayra, es experta en marketing y entiende la importancia de las estrategias publicitarias basadas en establecer conexiones con la gente, con sus sentimientos. Es mucho más recomendable una campaña persuasiva que una intensiva, que la gente se enamore del producto, de la historia, de la experiencia.

Según sus excompañeros, una de las principales habilidades de la exdirectora general de Nissan Mexicana es influir, vender no solo un artículo, sino toda una estrategia y lo mejor de todo, sin ser agresiva.

Dependiendo de cada cliente se debe plantear una estrategia distinta. Si la compradora es una madre de familia quizá es mejor hablar sobre la seguridad y los espacios del auto; a un hombre tal vez le interese más escuchar sobre la potencia del motor, el equipo de sonido; a otras personas les llamarán más la atención los acabados, el color de la pintura… Para vender primero debes conocer a tu cliente, lo que espera y muy importante: lo que le emociona.

Mayra González, empezó en el 2001 como vendedora en una agencia de autos en México y en el 2019, a los 43 años de edad, fue nombrada directora general de ventas globales de Nissan Motors en Japón.

En el ámbito automotriz hay muchos aspectos en los que Mayra se ha convertido en “la primera mujer en…”, incluyendo el de ser la que impuso el mayor récord de ventas de vehículos en México y aunque reconoce que en ocasiones ha sido discriminada en un mundo que hasta hace tiempo solo era para hombres, sabe que su cargo actual no lo consiguió como una “cuota de género”, sino gracias a la ruptura de barreras mentales, a la seguridad en sí misma, al dominio de sus temores, a la disciplina, el autoconocimiento, pero sobre todo: al talento, y éste nada tiene que ver con ser hombre o mujer.

Y aquí entra otro reto: ¿cómo mantener los pies en la tierra cuando alcanzas el éxito?

Mayra cree que los líderes no deben temer a mostrarse vulnerables, pues ello no es un defecto, sino una fortaleza, ya que demuestra que son personas como cualquier otra. También ha reconocido que no es ya la misma que vendía carros hace 20 años, sus triunfos y fracasos la han transformado tanto en lo personal como en lo profesional, siempre recordando dónde empezó. Pocos días después de anunciarse su nuevo cargo en Japón, respondió a un tuit de un vendedor principiante que buscaba clientes y le dio ánimos para continuar sus esfuerzos. Para algunos quizá ello fue un simple mensaje. Para ese joven seguro significó una gran motivación.

Este tipo de experiencias nos dejan el recordatorio de siempre tener presente cómo empezamos a construir nuestra historia profesional, cúal era el sueño de entonces y si se ha modificado en el camino o se ha ido materializando pero aún más importante, tener la conciencia absoluta de si lo estamos trabajando o hemos esperado a que se cumpla solo.

Platícame tu experiencia, ¿tienes alguna historia de liderazgo o éxito que admires? me encantará leerte.